LA NO-ALGARABÍA
De proyectos
a remordimientos y de errores a deseosLxs mortales
insensatxs pasean su locura.En las desdichas
presentes, en la esperanza de placeres,Nunca
vivimos, esperamos la vida.Mañana, mañana, se dice, va a colmar todos nuestros anhelos:Llega mañana
y nos deja aún más desdichadxs.¿Cuál es el
error, ay, del cuidado que nos devora?Ningunx de
nosotrxs quisiera recomenzar su curso:Maldecimos
la aurora de nuestros primeros momentosY de la
noche venidera esperamos todavíaLo que en
vano prometieron nuestros más hermosos días.
John Dryden
Solamente el gris-nube sobre el océano.
Y toda la juventud alborotada,
pero en mute.
A los juegos calmos hay que
entenderlos y al bamboleo nauseoso del buque.
No día, es noche.
Se apaga por completo el berreo
del motor y es imposible consolar al niñe diciéndole que mañana todo va a estar
bien. Les niñes no saben del mañana.
En cambio, con la adultez
despierta la angustia -ya tan familiar- de comprender lo breve del momento.
Por eso sufrimos menos, les
adultes. Y por eso también somos -qué ironía- más infelices.
Es febrero y no llueve, pero
el gris-nube se agolpa pesado sobre la línea del mar.
Y yo debo confesarte que estoy
dura, aterrada, en cámara lenta, distraída.
Quisiera poder decirte lo que
siento. Pero no puedo.
Son tiempos difíciles.
Marina Melantoni © Todos los derechos reservados.
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